El primer activista ecologista

Zarathushtra, contrariamente a muchos fundadores de religiones, descubrió y comulgo
con Dios a través del estudio contemplativo de la naturaleza; del universo entero.
Encontró en el universo una obra maestra, diseñada por un "artista". Admiró cada parte de esta obra maestra y alabó al Maestro, al artista divino que él había descubierto en medio de la de rituales, supersticiones, mitologías, politeísmo, cultos de chamanicos que abundaban es su tiempo. Él reconoció a Dios como el máximo-intelecto, Creador, Mantenedor y Promotor del cosmos; celebrando la gran obra de dios, y se propuso trabajar a través de los pensamientos buenos, las palabras buenas, y los hechos buenos para poder ayudar y cuidar así, la acción creadora divina; promoviendo la creación a través del “alegría-generadora" en la tierra. Una lectura de los Gathas, las canciones sublimes de Zarathushtra, nos muestran que históricamente Zarathushtra no sólo es el primer monoteísta, sino que también el primer activista ecológico. Su primer canto se centra en servir sabiamente humildemente; y agradar al Creador y a su creación.

Zarathushtra nos dice que uno debe mirar la naturaleza y sus fenómenos con ojos claros y de forma objetiva. No se debe imaginarlos como dioses y diosas imponentes a los cuales hay que complacer o rendirles culto. Él desea que nos valorares y usemos
nuestras potencialidades en promover el mundo viviente, que engloba a toda la creación, humanos, animales y plantas.

Dios es el creador, sustento y promotor del universo, por lo cual, es digno de culto. Si uno no valora la creación de Dios, no puede comprender al Creador y no puede entender el propósito de su creación. Una canto del Haptanhaiti, compuesta por un compañero de Zarathushtra, dice que nosotros veneramos a Dios a través de la consideración de su creación.

Si tenemos una real consideración por los árboles, nunca los tumbaremos, despoblando
la tierra de bosques. Debemos hacer un uso apropiado de ellos, cortándolos de una
manera sabia, que permita que la tierra se mantengan verde y al mismo tiempo, reunir
nuestros verdaderos requisitos de madera. Si multiplicáramos el proceso de cuidado de
la naturaleza, no tendríamos aire y aguas contaminadas; ni superficies de la tierra
fuertemente erosionadas, ni ninguna especie animal extinta. El hombre dotado de la
facultad creativa divina, debe alentar, promover, mejorar y reproducir los mejores
animales, plantas, y todos los elementos que hacen de nuestro mundo un lugar
maravilloso. Debemos de mantener y promover el ciclo natural de los elementos en que
cada célula orgánica y cada partícula inorgánica tiene una papel específica que jugar.

Así estaremos en verdad en paz con nosotros mismos, en armonía con la naturaleza, y
en comunión con Dios.

En las gathas, escritas por el mensaje de Zarathushtra se nos dice:

"Ciertamente el mundo viviente es nuestra buena vivienda, aun más es lo nos da nuestra perseverancia y poder. Ahora es que comprendemos, que el Sabio Dios ha aumentado la prosperidad, trabajar para que el mundo viviente aumente su esplendor".

"Tu, Sabio, Quien has diseñado el mundo viviente, las aguas, y las plantas por medio de Tu más progresiva mentalidad, otórgame, en acuerdo con la doctrina de la buena mente, inmortalidad, perfección, firmeza y perseverancia. ". [Gahthas 16.7]

"Mazdah, Dios Sabio, con reverencia y manos alzadas a Ti, yo oro. Primeramente, pido que pueda ejecutar todos mis actos, basados como están en el juicio que nos da la buena mente, en preciso acuerdo con las leyes de la rectitud, para poder agradarte a Ti y al alma del Mundo Viviente".
[gatha 1.1]

Las gathas repetidamente alaban,honran y defiende la preservación y promoción del
ambiente. Es de hecho, el unico libro sagrado que pone un gran énfasis en respetar a la naturaleza y conservar el ambiente. Es asombroso ver a los activistas ecológicos entusiásticos hace 3,500 años, pero a la vez, es triste descubrir que semejante movimiento no ha tenido éxito debido a los grupos anti-activista ecológico conscientes y inconscientes. Hoy nuestro mundo se contamina y es envenenado por industrias sin discriminación, guerras, pobreza y hambre.

Es por consiguiente muy conviniendo escuchar a Zarathushtra, cuyas canciones divinas
llevan un mensaje espiritual y material: Promueva un puro, pacífico, próspero y
progresivo mundo bueno para las plantas y todos los animales que viven en el aire, la
tierra y en el agua. Escuche el mensaje de Zarathushtra, y trabaje para hacer de la tierra un lugar mejor donde vivir. Permítanos anunciar nuestras alabanzas para cada fenómeno de la naturaleza, realizar el primer deber hacia dios, que es promover un mundo mejor, y cantar dulcemente como Zarathshtra cantó a las glorias de Ahura Mazda.

USHOA, Edición Abril - Mayo del 2003
de Virasp Mehta
Traducción : Farhang Pirnazar